Expresividad y franqueza
Los españoles pasan mucho tiempo fuera de casa y por ello han desarrollado una capacidad de conversación muy fluida y abierta; no es raro entablar una conversación saludable con ellos en bares, tabernas y lugares de entretenimiento en general. El saludo con dos besos, uno en la mejilla, es quizás la mayor cortesía física que ofrecen a los visitantes extranjeros.
Sin embargo, otro tipo de contacto físico entre personas está reservado para parejas o viejos amigos, y es inusual que las personas sean muy expresivas al respecto. Entre los hombres, este contacto está reservado para cruzar las manos sin mucha efusión.
El habla es rápida incluso cuando no tiene prisa, y el tono suele ser imperativo sin indicar superioridad, disgusto o distancia. Los españoles son muy directos y expresivos en sus opiniones y juicios, que generalmente defienden con argumentos honestos y sinceros.
pasión por el tabaco
Una costumbre española que casi siempre ha sorprendido al visitante es la pasión por el tabaco. Es posible que ninguna otra parte del mundo, excepto Grecia, fume tan libre y constantemente. Incluso en lugares donde estaba prohibido fumar, los españoles lograron no abandonar esta costumbre nacional. Además, el tabaco era uno de los productos que estaba disponible a cualquier hora del día.
Sin embargo, desde enero de 2006, como parte de la lucha mundial contra el tabaquismo y en defensa de la salud pública, entró en vigor en España una de las leyes más restrictivas actualmente en vigor, que regula el consumo, venta, oferta y publicidad de cigarrillos, que destierra de todos los espacios de la vida social, excepto la calle, las casas y los pequeños lugares autorizados.
También establece que el tabaco se comprará únicamente en estancos o máquinas expendedoras que cuenten con las correspondientes autorizaciones administrativas, cuyo uso está prohibido a los menores de 18 años. Asimismo, las multas previstas para los infractores varían de 30 euros a 600.000 euros, en la banda principal, pudiendo llegar a 10.000,00 euros para infracciones graves. Se espera que el consumo disminuya paulatinamente y que al cabo de cinco años se reduzca en no menos del 10%.
admiración por la monarquía
Los españoles se sienten orgullosos de conservar con ardor la imagen de sus reyes como jefes absolutos del Estado. Es una característica que va más allá de las leyes y derechos que la engloban, es una actitud de profunda admiración y respeto por la monarquía, institución que forma parte inequívoca del ser español. Para muchos, la Familia Real es también el modelo ideal para la vida familiar. Además, a los españoles les interesa conocer el día a día de los reyes, el príncipe y su familia, así como la fantasía, como si fueran los protagonistas del espectáculo.