La norma aprobada hoy también incorpora la garantía de mantener el poder adquisitivo de las pensiones durante 2020 en caso de que el IPC de referencia se desvíe por encima del 0,9%.
La revalorización de pensiones beneficia 9.801.016, pensiones contributivas y más de 655.000 clases pasivas (datos de noviembre). Además, se incrementarán 451.156 pensiones no contributivas y 195.000 hijos a cargo con discapacidad mayor o igual al 65%. El coste anual de la medida es de 1.406 millones de euros, que se distribuye de la siguiente manera:
Tras la revalorización, la más habitual de las pensiones mínimas, la pensión de jubilación para mayores de 65 años, con cónyuge a cargo, alcanza los 843,40 euros mensuales, repartidos en 14 pagas (11.807,60 anuales).
Además, la pensión máxima para 2020 es de 2.683,34 euros al mes, 37.566,76 euros al año.
En cuanto a la pensión del Seguro Obligatorio de Vejez e Invalidez (SOVI) caducado, alcanza los 437,7 euros mensuales tras la revalorización, en el caso de las pensiones no concurrentes (6.127,80 euros/año).
En el caso de las no contributivas, la cifra para 2020 queda fijada en 395,6 euros al mes (5.538,40 euros al año).
Por otro lado, cabe señalar que los atrasos del mes de enero se incluirán en la nómina de febrero, ya que ha sido necesario desarrollar una aplicación informática específica para el pago de la revalorización del mes de enero.
Más poder adquisitivo en 2019
El año pasado, los jubilados ganaron poder adquisitivo por primera vez en los últimos años. La revalorización fue del 1,7% para las de carácter general y del 3% para las pensiones mínimas.
Según los datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística, el IPC adelantado de diciembre de 2019 fue del 0,8% interanual, lo que supone una ganancia de poder adquisitivo de 2,3 puntos porcentuales, en el caso del mínimo y de alrededor de 1 punto porcentual para el el resto (0,9%).